En Freixenet nos gusta celebrar los pequeños y grandes momentos de la vida con cava. Es importante tener en cuenta algunos detalles para disfrutar al máximo de la copa de cava. A continuación os dejamos algunos consejos que os pueden ser de gran utilidad.
La mejor forma de abrir una botella de cava
Aunque no lo parezca, con más maña que fuerza. Sujetamos con una mano el tapón y giramos la base de la botella con la otra mano inclinándola ligeramente. Opcionalmente, si el tapón se nos resiste o resbala, podemos volver a colocar el alambre sin apretarlo para tener más sujeción. De esta manera evitaremos verter cava, ¡preferimos bebérnoslo!
¿A qué temperatura hay que servirlo?
¡No te olvides de ponerlo en frío! La temperatura es esencial para apreciar todo el aroma del cava y la finura de sus burbujas. En todo caso, el cava debe tomarse frío, pero no congelado. La temperatura de servicio ideal para apreciar con mayor intensidad todas las cualidades del cava y disfrutar de una mejor experiencia es entre 6° y 8° para los cavas tradicionales (menos de 15 meses) y entre 8° y 10° para los Reserva y Gran Reserva. Si se sirve a menos temperatura no se aprecian sus aromas y se pierde parte del gusto.
¿Cómo enfriar el cava si no tenemos nevera?
Si no disponemos de refrigeración o estamos al aire libre, hay un truco muy útil para enfriar el cava con rapidez. Echamos agua y hielo en una cubitera, metemos la botella y añadimos una porción generosa de sal. ¡En 20 - 25 minutos el cava estará frío y listo para servir!
¿Cuál es la mejor copa para tomar cava?
Finalmente, y aunque no lo parezca, el tipo de copa que usemos para servir el cava es muy importante. Lo ideal es usar copas tipo flauta o tulipa, estrechas y altas, que conservan mejor la burbuja y desprenden mejor los aromas. Para los Gran Reserva es aconsejable una copa con el cuerpo más ancho.
Publicado hace 4 años